Su utilización reduciría notablemente las necesidades energéticas y la huella de carbono de los centros de datos, que aumentan su capacidad un 27% anual hasta 2025, con volúmenes de datos que se duplicarán aproximadamente cada tres años, según datos recientes de IDC. Un ritmo que será poco sostenible desde el punto de vista medioambiental si no se toman las medidas adecuadas
Cada año que pasa, las infraestructuras de los centros de datos van creciendo para cubrir las necesidades en continua expansión de la población y, con ello, sus necesidades energéticas y su huella ambiental. Un estudio publicado en la revista Science aseguraba que en 2018 el consumo eléctrico de estas instalaciones representó el 1% del total mundial y casi el 2% del de EE.UU., y calculó que sus sistemas de almacenamiento basados, esencialmente, en disco podían llegar a consumir el 19% de su gasto energético total, conllevando un gasto eléctrico de 14 mil millones kWH y la generación de 6,5 millones de toneladas métricas de CO2, cuando la fuente de energía utilizada es el gas natural.
De hecho, la mitad del consumo energético del disco proviene del sistema de ventilación y enfriamiento de la solución, al estar en constante rotación. Este sistema es clave para garantizar la longevidad del disco mientras que la cinta no necesita este tipo de sistema de enfriamiento térmico tan costoso. La cinta es, por tanto, una solución mucho más eficiente al no consumir electricidad adicional cuando los datos ya han sido escritos sobre la misma.
En este sentido, Fujifilm está utilizando todo su conocimiento para innovar de forma continua en el campo del almacenamiento de datos en cinta, una tecnología con una larga trayectoria que hoy alcanza una cuota de mercado del 60% por las grandes ventajas que presenta para el archivo de datos. Se trata de una de las grandes apuestas de la compañía para ayudar a los centros de datos a que sean climáticamente neutros y a todas las organizaciones, en general, a conseguir sus objetivos de sostenibilidad.
Ampliar el uso del almacenamiento en cinta puede tener un impacto positivo en los objetivos de sostenibilidad. Entre el 60% y el 80% de la información almacenada en el mundo se considera inactiva, es decir, datos que deben conservarse durante extensos periodos de tiempo por su valor, pero a los que rara vez se accede. Se estima que si el 60% de este volumen de datos se trasladara a cinta, las emisiones de CO2 podrían reducirse en 72 millones de toneladas en solo diez años, el equivalente a las emisiones de gases de efecto invernadero de prácticamente 16 millones de vehículos conducidos en un año, utilizando la calculadora de equivalencias de la EPA.
“El almacenamiento en cinta por el que está apostando Fujifilm repercute en un guardado de datos mucho más seguro y en un gasto casi nulo de energía. Dos elementos que impactan positivamente sobre la sostenibilidad de las empresas que utilizan esta tecnología, tanto desde el punto de vista económico y medioambiental por el ahorro energético que consiguen, como desde la perspectiva de la calidad y la excelencia que pueden garantizar a sus clientes”, indica Anna Baldrís, Business Development Manager Recording Media de Fujifilm Iberia.
Arriba, en la foto, Anna Baldrís, Business Development Manager Recording Media de Fujifilm Iberia / Imagen cortesía de Fujifilm